Tras establecer que las violaciones masivas de los derechos humanos durante los conflictos armados constituyen una amenaza para la paz y que las mujeres son las personas más afectadas por el flagelo de la guerra, desde 1999 el Consejo de Seguridad adoptó numerosas resoluciones destinadas específicamente a este grupo. Estos instrumentos contribuyen al desarrollo del derecho humanitario aplicable a las mujeres y reconocen el valor de la participación activa de la mujer en los esfuerzos por alcanzar la paz. En este artículo, se analizan ante todo las bases sobre las cuales el Consejo ha podido asumir la responsabilidad de la protección de las mujeres en situaciones de conflicto armado y, a continuación, se examina la protección efectiva que ofrece. El autor concluye que, en este papel, el Consejo ha logrado diferentes grados de éxito y señala que las resoluciones temáticas y declarativas en las que mayormente se basa no son vinculantes y que, por ende, son relativamente eficaces sólo en lo que respecta a las disposiciones que comprometen a los órganos de las Naciones Unidas. El autor opina que el Consejo podría cumplir mejor su función adoptando resoluciones específicas para cada situación, en lugar de recurrir a resoluciones declarativas del derecho internacional. (en inglés)