Los grupos armados desempeñan un papel fundamental en los conflictos contemporáneos y están vinculados con muchas de las preocupaciones humanitarias ocasionadas por los conflictos. Los actores políticos y humanitarios que procuran promover el respeto de las víctimas de los conflictos deben destinar recursos al estudio y a la comprensión de los grupos armados, determinar el derecho que se les aplica y evaluar sus límites. Para ello, posiblemente sea necesario aplicar un enfoque pragmático y tomar en cuenta la perspectiva de los grupos armados, en lugar de considerarlos una mera anomalía en un sistema internacional concebido por y para los Estados.